7M. 7 de marzo 2014, a 15 años de uno de los momentos históricos que
quedarán en la memoria de los hincas de Racing. Aquellos que lo vieron ganar
todo antes que todos, aquellos que ni siquiera lo habíamos visto salir campeón
y aquellos que aún no habían nacido, con
el correr de los años se enteraron de esa semana de 1999 en donde el club vivió
uno de los peores escenarios de su historia : La Quiebra.
La frase de Liliana Ripoll ha disparado contra los corazones académicos
que no dudaron, luego de conocerse la noticia en movilizarse hasta la sede
ubicada en Mitre. La Sala II de la Cámara de Apelaciones de La Plata ordenó el
cese de la continuidad de la quiebra del club.
Una imagen que también será recordada por medio del enojo y nerviosismo
fue portagonizado por el entonces presidente, Lalin. Cuando finalizó una frase
: " Tranquilícense. Racing todavía no cerró. Venimos a dar la cara, como
siempre", un redoblante le dió de lleno en su cara provocandóle una herida
que no era más profunda que la propia de los racinguistas.
Se dijieron muchas cosas: La posible intervención del Gobierno, un
dinero que pondrían los famosos hinchas hasta una posible mano negra de
Grondona. Estaba a punto de comenzar el Torneo donde Racing recibía a Talleres,
pero la AFA aceptó el pedido de postergación del partido para así evitar
cualquier evento anti deportivo. Las horas pasaban pero la angustia seguía y
crecía con el correr de las horas, hasta se conocieron los números de la deuda,
Francisco Peréz Díaz ex-síndico reclamaba una deuda de 231.000 dólares más
intereses.
Movilizaciones hacia la Afa y luego a Plaza de Mayo donde también se
encontraban hinchas de Gimnasia y Esgrima de La Plata. A su vez, hubo marchas
hacia el Congreso y La Plata. Pese a no haber jugado, miles de hinchas llenaron
el Coliseo, incluso superando a los clubes que habían disputado sus partidos.
El cántico que aún sigue vigente en todos los partidos que
Racing disputa : "De pendejo te sigo..." no hace más que izar con
orgullo y pasión el amor propio hacia el club. Donde miles vivieron momentos de
extrema felicidad cuando vieron a la Academia ser heptacampeón, y otros miles
vivieron el momento negro y nefasto del mismo.
Racing va más allá de todo. De la vida, del amor, de la razón. Sólo los
que comparten esta misma pasión entenderán que este día no es ni será uno igual
a cualquier otro. Que significa el haber defendido los colores y la historia
del club a capa y espada como pocos supieron hacer.
Racing no es sólo un club de fútbol, donde se han ganado campeonatos,
locales e internacionales, es esa alegría inmensa que representa ir a la cancha
a alentar, gritar, saltar, abrazarse en cada gol con quien esté al lado. Porque
Racing une pero también separa. Y en este momento crítico a nivel profesional e
institucional no es la excepción. ¿Que pasará de acá a final del Torneo ? ¿O en
el segundo semestre? Nadie lo sabe.
Sólo sabemos que los hinchas, estaremos ahí, en el Cilindro alentando
por los colores y por la historia, como siempre.
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