El árbitro Germán Delfino expulsó al defensor uruguayo Gerardo Alcoba, a los 42 minutos de la etapa complementaria, al entrenador Pablo Morant y al volante Facundo Curuchet, tras terminar el partido, ambos de Colón.
De esta manera, Unión volvió a la victoria como local luego de más de un año sin ganar, ya que la última había sido el 19 de mayo de 2012 ante San Lorenzo (1-0), por la 15ta. fecha del torneo Clausura. Desde entonces, pasaron 19 partidos (catorce empates y cinco derrotas)
Por una polémica decisión del gobierno santafesino de no permitir el ingreso al público de ambos equipos para evitar incidentes, ya que Unión descendió la fecha anterior, sumado a la remodelación del estadio, el clásico se jugó con tribunas vacías.
No hubo ninguna clase de banderas, cantos, papelitos, ni fuegos artificiales, todo lo que forma parte del folclore futbolero en la previa de un cruce con tanta historia entre 'tatengues' y 'sabaleros'.
En el partido, los dos equipos jugaron el partido como un verdadero clásico, entregando todo y dejando en claro que más allá de la pobre actualidad de ambos en el torneo estaba el orgullo en juego.
Después de haber perdido la categoría con la anterior derrota ante San Lorenzo (4-2), Unión buscaba una alegría en uno de sus últimos partidos en casa, mientras que Colón no perdía la ilusión de clasificar a la Copa Sudamericana.
En el entretiempo, Facundo Sava ajustó algunos detalles en mitad de cancha, Unión mejoró su imagen y consiguió el gol gracias al penal que convirtió Damián Lizio, luego de la clara infracción de Mauricio Romero a Pablo Magnín.
Un minuto después, el juez ignoró un claro penal sobre Facundo Curuchet y, tras eso, le mostró la roja directa al defensor uruguayo Gerardo Alcoba por una infracción propia de la vorágine del juego sobre Lizio.
Por: Natalia Ramírez
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